domingo, 27 de diciembre de 2009

Con faldas y a lo loco


En una de mis sesiones de cine navideño tuve ocasión de volver a ver "Con faldas y a lo loco" una de las películas de la gran Marilyn. Siempre me han apasionado las historias llenas de tragedia como la de esta mujer. La tragedia hace más humanos a los desconocidos.

Viéndola en pantalla me hizo pensar sobre el cuerpo femenino y sobre cómo los gustos de la sociedad cambian. Me encanta ver películas de aquella época porque las mujeres que aparecen en ellas me resultan más reales que las que veo ahora, al menos en lo que a físico se refiere. Aquellas mujeres no necesitaban meterse en una talla 36 para ser consideradas auténticas bellezas. Este es otro de los casos en los que creo que la sociedad ha evolucionado,pero a peor, el prototipo de belleza ha cambiado sin duda,pero ¿a qué precio?.

A menudo oímos casos de personas que fallecen por trastornos alimenticios, mujeres esqueleto pisando las mejores pasarelas del mundo...y parece que a muchos les importa,pero en mi opinión no deja de ser una doble-falsa moral, porque pasan los años y yo no veo que el panorama cambie. Hace años tuve la oportunidad de visitar la planta del Hospital de León en la que ingresan a personas con trastornos alimenticios. Fue una de las tardes más duras de mi vida por lo que allí vi. Cuando lo vemos por la tele nos quedamos como quien ve una película, pero no lo es cuando toca presenciarlo in situ.

Cuando veo a Marilyn veo un cuerpo saludable y proporcionado. Un cuerpo de mujer con curvas, caderas anchas y muslos con carne, y siento pena porque ese ya no es el prototipo que se lleva.
Cuando salgo por ahi a menudo cuando escucho a un hombre decir "mira qué tía más buena" refiriéndose a una mujer que más que mujer parece una escoba con abalorios, no consigo entender qué es lo que tiene de bello una mujer prácticamente plana que cuando la miras te da la sensación de que se romperá en cualquier momento. No las suelo considerar un prototipo femenino, ni siquiera puedo considerar que tengan cuerpos proporcionados (porque si no hay carne ya me dirás de dónde sacamos la proporción). Después no ayuda mucho el hecho de ver que todas van vestidas igual que los maniquís del Bershka o de cualquier tienda de ese estilo, tiendas en las que es casi misión imposible encontrar una talla 42.
Como diría mi madre: vista una, vistas todas.

En contraposición a esto, he de decir que también hay casos de hombres que me han dicho: "si la verdad es que tenemos esa costumbre de creer que la más buena es la que más delgada está o la que lleva la ropa más ajustada, pero cuando decidimos emparejarnos generalmente acabamos con chicas que tengan más donde agarrar" (esto dicho por un amigo mío que se casó recientemente). Quizá lleve razón, pero no me cuadra este planteamiento con lo que veo por ahí la mayoría de veces.

Suerte que me queda el consuelo de ver a alguna Marilyn del siglo XXI que consigue triunfar por encima de mujeres esqueletos por las que millones de hombres perderían la cabeza. Me viene a la mente Kate Winslet, que a mi modo de ver opino que es una mujer preciosa aunque no se meta en una 36. Tener algún kilo demás no tiene por qué ser malo, siempre y cuando no afecte a la salud.

Por mis palabras ha quedado claro que no soy la mujer-palo. Tampoco soy una Marilyn. Tengo mis kilos,pero al menos bien repartidos, y tengo la felicidad de no rendirme ante el espejo y ponerme a hacer una dieta que me acabe amargando la existencia. Que me llamen tía buena por la calle no se merece tal esfuerzo, ¡me compensa más comer chocolate a diario!. Lo importante es cómo se vea uno mismo, lo demás es secundario.

Así que estas Navidades si os hace felices pegaros comilonas y pasar olímpicamente de la dieta: hacedlo ¿por qué no?.

lunes, 21 de diciembre de 2009

365


365 días que nos dejará el 2009, a diez días de que finalice el año lo primero que viene a mi mente es lo rápido que se ha pasado. Muchas veces me han dicho que a partir de los 20 los años pasan volando...creo que tenían razón. Sin darme cuenta estoy mucho más cerca de los 30 que de los 20, y a pesar de ciertas cosas, han sido años bien vividos y aprovechados.

Este año nos toca vivir una Navidad al más puro estilo película de Hollywood,eso sí, con algo más de crisis (sólo hay que ver el alumbrado,pero al menos este año hay alumbrado). Rodeada de nieve cada vez que salgo a la calle estoy deseosa de volver a casa y pegarme al radiador, que la nieve es muy bonita y todo eso...pero mejor estar detrás de la ventana viéndola, con una buena taza de café y una manta sobre la espalda.

A veces no logro comprender qué encanto le ve la gente a estas fechas, cuando yo estoy deseando que se pasen lo antes posible. Navidad...esa época de amor y paz, cuando la gente con la que ya no te llevas de repente aparece de la nada y te dice "¿lo arreglamos?" y tú te quedas con cara de poker mientras imaginas que de repente les cae un piano encima, y piensas para ti "será que le ha visitado el fantasma de las navidades pasadas o el Grinch, y que si no venía a hacer las paces conmigo le han amenazado con algo". Siento ser así de sarcástica, pero realmente este tipo de cosas me puede. Un año da para mucho. Prefiero juntarme con mis seres queridos en cualquier momento del año simplemente porque me apetezca, no por una absurda obligación. Prefiero pegarme la comilona del siglo en cualquier otro momento, de hecho en Navidad pierdo el apetito y un par de kilos todos los años. Prefiero hacer las paces con la gente en otro momento también. Con razón muchos dicen aquello de "Feliz Falsedad", ¿es que no hay más momentos?.

Para mí estos días son época de balance de lo que el año ha traído y de lo que se lleva. No me puedo quejar de este año, aunque en algún aspecto ha sido movidito, me ha dejado muchas cosas aprendidas. Y yo he dejado muchas piedras que me obstaculizaban el camino. Puedo sentirme satisfecha. Recordaré 2009 como el año de Limpieza General.
La fortuna me permite tener a mi familia bien y felices, unos amigos a los que adoro que son también mi familia, un trabajo con el que estoy casada (será lo único con lo que soy capaz de comprometerme), alguien que me mantiene el corazón calentito (aunque muchas veces el calentón sea por enfados).

Y al año que entra le pido más paciencia para quienes no entienden que necesito tiempo para cambiar algunas cosas, le pido un puesto de trabajo para mi gente que oposita que se lo merecen,le pido que mi salud no nos dé más sustos, le pido tranquilidad para mí y para los que me rodean (sobre todo los que sufren en este momento), le pido elecciones anticipadas (por pedir que no quede, que está la cosa muy malita).

¿Y tú qué pides?

domingo, 13 de diciembre de 2009

Cuando el karma efectúa un revés...

karma.

(Del sánscr. karma, hecho, acción).

1. m. En algunas religiones de la India, energía derivada de los actos que condiciona cada una de las sucesivas reencarnaciones, hasta que se alcanza la perfección.

2. m. En otras creencias, fuerza espiritual.

No sé si alguna vez habreis visto la serie "Me llamo Earl", para los que no: se trata de un hombre que se pasa media vida delinquiendo y un buen día le toca la lotería, pero justo en ese momento es atropellado por un coche y su boleto sale por los aires. Mientras está en el hospital ve un programa en la televisión acerca de cómo el karma actúa dependiendo de si nuestros actos son buenos o malos. A partir de ahí comienza a realizar una lista con todas las cosas malas que hizo, para tratar de enmendarlas. Y así va arreglando desperfectos esperando que el karma sea generoso con él como recompensa.

El karma es de esas cosas que siempre me han llamado la atención, siempre escuchaba a mi abuela hablar de la "justicia divina" y de "quien la hace la paga".

A medida que pasa el tiempo me doy cuenta que aquellas palabras no iban tan desencaminadas. Observando casos que me han tocado de cerca, o a mí misma en alguna ocasión, me doy cuenta de que cuando hacemos algo malo a otra persona (y si es intencionadamente aún peor) esas fuerzas del universo que respiramos pero no vemos, se encargan de efectuar un trabajo minucioso, haciendo que paguemos por ese daño de alguna forma.

No puedo decir que yo no sea una persona vengativa, pero cuando alguien me hace daño, decido sentarme a esperar sin hacer nada, muchas veces ni siento deseo de que algún mal le ocurra a esa persona. Simplemente dejo pasar el tiempo, y una vez que el tema se ha quedado aparcado en algún rincón de mi "desmemoria" alguien aparece y me dice: "¿a qué no sabes lo que le ha pasado a fulanito?". En ese momento pienso: me alegro de no ser la causante de su desgracia. Y por otro lado intento no alegrarme de su problema, quizá sea el miedo a que el karma me castigue por tener malos deseos hacia otra persona. Pero en definitiva digo: cada uno recoge lo que siembra. Y pienso que el karma es más efectivo en caso de malas acciones que de buenas acciones. Muchas veces hemos escuchado aquello de "¿por qué a las buenas personas les suceden cosas malas", una de dos: o algo habrán hecho o el karma está ocupado con otras cosas.

No creo que haya que esperar a una supuesta reencarnación para que el karma actue. Ni siquiera creo en la reencarnación. Y el cielo o el infierno es algo que ya existe en vida, no hace falta morirse para comprobarlo. A veces he pensado que el karma más que algo perteneciente al universo, es algo que la humanidad crea con la fuerza de su mente de alguna manera y de forma casi inconsciente, es por esto que en ocasiones las leyes del karma no se cumplen, es una cuestión de mentalidad y fortaleza interna, es como si hubiese personas protegidas contra lo malo, y personas que sólo atraen desgracias.

No tengo explicación científica para esto, sólo años de observación.

Seguro que a más de uno de vosotros alguna vez os ha pasado que el karma os la ha devuelto, o que habeis tenido justicia sin haberla buscado.

Bien dice el refrán: siéntate a la puerta de tu casa a esperar y verás el cadáver de tu enemigo pasar.




martes, 1 de diciembre de 2009

Doblen sus apuestas


De nuevo una semana más siendo una observadora analítica del carnaval humano. En este caso el carnaval se convierte en una especie de casino en el que siempre se juega a dos bandas. Por si quedan dudas, el tema de hoy es: personas que juegan a dos o más bandas.

Hoy no me voy a centrar exclusivamente en el tema masculino o femenino, ya que el tema del doble juego se da en ambos casos.

Analizando objetivamente diversos casos que he visto a lo largo de los años, siempre llego a una misma conclusión: la persona que juega a dos bandas carece de autoestima.
Me explico, generalmente son personas incapaces de estar solas más de un par de meses, necesitan siempre alguien al lado para afirmarse a sí mismas como personas válidas en el ámbito amoroso. Pueden pasar años pululando de flor en flor (o de capullo en capullo jajaja) huyendo de ese vacío emocional que sienten, y creyendo en príncipes azules y que el amor todo lo puede. La parte oscura llega cuando les toca pisar la realidad, entonces caen en la cuenta de han perdido media vida viviendo una mentira. Porque para saber estar acompañado,hay que aprender primero a estar solo y lograr ser feliz así. Hasta ahí millones de personas han pasado por esto alguna vez.

Ahora llega la segunda parte: ¿qué ocurre cuando una persona no es suficiente y se necesitan extras?. Ocurre que deja de ser autoengaño para convertirse en engaño múltiple. Porque hay que ser valiente para jugar a dos bandas, y digo valiente en tono irónico, ya que siempre me resultaron las más cobardes este tipo de personas, porque engañan sin tener el valor de decir la verdad precisamente por miedo a perder lo que tienen. Y son capaces de decirle a las dos personas un te quiero sin inmutarse, y son capaces luego de no tener remordimientos. Lo más curioso es que cuando la farsa se descubre (es algo que ocurre inevitablemente) esa persona adopta el papel de víctima de la situación con la típica excusa de: ambos/as me importan. Otra mentira más. Si alguna de las dos personas importase, el juego a dos bandas no existiría, porque a veces hay que elegir y nunca queremos a dos personas por igual en temas de amor. Lo que sucede es que es muy cómodo disponer de variedad y atenciones por doble partida. Y si uno falla, queda el otro cubriendo la suplencia.

No deja de ser triste ver a personas que carecen de amor por sí mismas, que carecen de sentido de la responsabilidad, de sentido de la lealtad, y sobre todo: que carecen de personalidad propia para saber qué es lo que quieren. Y así mientras agotan sus vidas, perjudican la vida de otros a la larga.

Hay más cola en el vampirismo emocional que en la cola del paro, que ya es decir.

Y siempre hay alguien que paga las consecuencias de tan deleznable acto:suele ser la persona que ha dado todo de sí sin saber que estaba siendo engañada.

Siempre me ha indignado este tipo de comportamientos, personas que son capaces de cualquier estratagema sólo por tener a alguien que les caliente la cama, pensando que de ese modo van a ser más felices o se van a sentir más completos. Ya sabemos que el amor es una apuesta continua, pero lo mínimo es tener legalidad al apostar.

Tengo claro que jugar con alguien no es amarle por muchos "te quiero" que se suelten por la boca...porque por la boca vive y mata el pez.

lunes, 23 de noviembre de 2009

Sobre la decepción


Decepción es aquello que uno siente cuando empieza a dejar de sentir.
A menudo en la vida tenemos diversos estados de ánimo que afectan a los que nos rodean,o estados de ánimo que los demás provocan en nosotros. Viajamos de la alegría a la tristeza, de la preocupación a la tranquilidad, de la normalidad al enfado...o simplemente hacemos un viaje de no retorno a la decepción.

Innumerables veces he hecho ese viaje. Cuando me enfado con alguien, suelo darle hasta tres oportunidades, porque al fin y al cabo un enfado es algo que se me acaba pasando en unas horas o unos días, y no va más allá después de dialogar la raíz del problema. Cuando alguien me decepciona se borran las oportunidades. Lo más curioso es que cuando la decepción llega, mi sentimiento o la importancia que le daba a esas personas, cambia hasta desaparecer.Llega un punto que todo se convierte en indiferencia. Porque las decepciones no se curan, por más que lo intente, siempre se quedan ahí escondidas para saltar a la mínima oportunidad de conflicto.

La peor parte de las decepciones es cuando quien nos las causa es alguien a quien apreciamos o queremos mucho, a menudo hablo con algunos de mis amigos sobre este tipo de situación, y todos coincidimos en que pasado un tiempo, vemos a esa persona por la calle y ni frío ni calor, y lo mismo ni siquiera un simple "hola". Nos deja de importar. Pero no por ello nos olvidamos del daño que nos hicieron. A menudo sé lo que quiero a una persona dependiendo del grado de daño que me pueda causar, "sé que te quiero porque me haces daño", sería algo así. Y se supone que con mucho daño acumulado puedes acabar hasta odiando a esa persona, pero gracias a la decepción, ni siquiera el odio importa, porque sencillamente te da igual todo. No le deseas mal,ni siquiera en el fondo, sólo te dices a ti misma: "olvida".

Y yo me pregunto: "si decepcionas a alguien conscientemente...¿por qué lo haces?,¿acaso no es mejor ir de frente antes que hacer daño intencionadamente?" Supongo que es una de esas preguntas retóricas para las que nunca tendré una respuesta demasiado convincente.
Mi lista de decepciones a veces crece por momentos, parece que las decepciones nunca vienen solas, así como hay épocas en las que no sucede absolutamente nada...familiares,amigos,parejas,compañeros de trabajo...siempre hay una nota discordante y siempre es por parte de quien no te lo esperas. E incluso a veces ni el pedir perdón es suficiente.
En definitiva, ante este tipo de situación, lo mejor es despedirse a la francesa...y sonreir.

miércoles, 18 de noviembre de 2009

Ahora


Ahora que termina el día y el cansancio se desborda por todos lados, me pongo filosófica haciendo recopilación de acontecimientos pasados y presentes. Tratando de ordenar ideas en una línea evolutiva. Aunque hablar de sentimientos no sea mi fuerte (algunos aseguran que no tengo de eso), mi cabeza da vueltas pensando en cómo era yo hace unos años cuando todo me lo tomaba a la tremenda, cuando la pasionalidad que le ponía a las cosas terminaban siempre en pelea. Ahora me río pensando que lo bueno de las peleas son las reconciliaciones. Pero no se puede pelear eternamente y mi época de estallidos acabó de un momento a otro, casi sin darme cuenta.
Resulta curioso ver a aquella yo y no reconocerla apenas a día de hoy. Ahora que todo es calma. Ya no discuto con las mismas ganas, o simplemente ya no discuto: me callo, agarro la puerta y salgo por patas. La yo de hace unos años me habría llamado cobarde. La yo de ahora me dice que es absurdo iniciar guerras que no conducen a ninguna parte.
No sé si son los años, o el irme cargando de nuevas responsabilidades, lo que hace que las cosas ya no me duelan tanto, o lo que hace que no me ría con los chistes o con las comedias.
Y todo mi mundo pasa por ese filtro llamado razón, todo, absolutamente todo, hasta el corazón. Unos me verán fría, otros irremediablemente lógica y práctica, otros ni siquiera me verán. No importa, la razón siempre nos da el alivio suficiente para creer que cualquier situación por mala que sea, acabará pasando. Incluso mi pasión por las personas o las cosas que hago pasan por ese filtro, pero no por ello vivo con menos fuerza o con menos ilusión. No puedo quejarme, a pesar de todo soy feliz siendo así, mis metas se van cumpliendo,y detrás de ellas vendrán otras,y así hasta la infinidad.
Ahora no me tomo los sentimientos con aquellas prisas de antes, y no es que no me importen, es que la fuerza de arranque no es la misma aunque la motivación sea enorme. A veces asusta pensar que me hago mayor cada vez que me pasa algo importante y me quedo como si nada. Da algo de miedo dejar de ser demostrativa con aquellos que quiero,pero en el fondo daría todo por ellos, lo malo es que no suelo decírselo. Lo bueno es que lo saben.

Ahora que se atropellan las semanas fugaces como estrellas de Bagdag,ahora que casi siempre tengo ganas de trepar a tu ventana y quitarme el antifaz...ahora que todos los cuentos parecen el cuento de nunca empezar...

Ahora que me veo en una canción...
http://www.youtube.com/watch?v=raf1xdL4OIE

martes, 10 de noviembre de 2009

Que no te pillen en un renuncio...ni en una renuncia


"Cuando el hambre entra por la puerta el amor sale por la ventana" una de mis frases célebres a altas horas de la madrugada cuando comparto con una buena amiga nuestra visión sobre el mundo y algún que otro chascarrillo cargado de crueldad.

El tema de ayer está relacionado con un post anterior. La posición de la mujer cuando se la incita a elegir entre desarrollar su vida profesional o renunciar a ella por irse detrás de un hombre.

Si una mujer elige desarrollar su carrera y tiene éxito en ella, se la considera una especie de hereje porque ha elegido quedarse donde está y no renunciar a sus metas, en vez de irse corriendo y dejarlo todo por ir detrás de un amor. ¿Cuándo hemos visto a un hombre renunciar a un buen puesto de trabajo por irse detrás de una mujer? La respuesta es sencilla: ellos no renuncian, porque para eso ya estamos nosotras.

Y me da rabia ver la de mujeres que conozco que acaban haciendo el ridículo, dejan futuros prometedores por irse a vivir con su pareja, por ponerse a fregar y planchar para él...y todavía parece que es él quien le esté haciendo un favor por mantenerla. Y no hablemos ya en el caso hipotético de que la relación se rompa, ahí es cuando llega la temida pregunta: ¿y ahora qué hago? Probablemente se te haya pasado la edad y el arroz,querida. Conozco a más de una que no se divorcia porque cree que pasados los 40 no será capaz de realizarse a sí misma,y es más cómodo vivir una vida absurda sin motivaciones, pero al menos él paga las facturas.

Y quizá el dinero no lo sea todo el la vida, pero esto no es sólo una cuestión de dinero, es una cuestión de realizarte a tí misma, puede que hagas algo que te motive,o puede que no,pero al menos sabes que es algo tuyo, que es un mérito propio, y nadie puede quitarte eso.

Y también está en caso en que se puede combinar una vida sentimental con un éxito profesional, no siempre son términos incompatibles. En cada persona las prioridades son diferentes, y porque la prioridad sea realizarte profesionalmente eso no te priva de tener sentimientos ni que no los consideres importantes, pero está claro que está mal visto socialmente si te sales del prototipo de mujer enamoradiza que daría su vida por el amor y el amor lo llena todo, porque no es así. Cúanto daño han hecho los cuentos clásicos (escritos por hombres fundamentalmente).

Luego llegan los hijos ¿quien se tiene que quedar en casa cuidándolos si no puedes o no quieres pagar a otra persona? Nosotras. Ellos no tienen que renunciar a su trabajo,porque ya estamos nosotras para cuidar a los hijos. (Conste que hablo de mayorías,espero que haya alguna excepción pero tengo mis dudas). Y si decidimos trabajar siendo madres, lo más repugnante es cuando oigo a una mujer decir "yo es que trabajo porque es una ayuda"...me parece una de las peores maneras de menospreciar su propio esfuerzo. Mi sueldo es mi sueldo,no una ayuda.

Lo que me queda claro es que por desgracia,muchos hombres se creen que somos bichos raros por no creer en cuentos de hadas, por no echarnos a morir cuando una relación se rompe y por tener la capacidad de saber estar solas y ser FELICES,si...lo repito: FELICES. La vida se puede llenar con infinidad de historias que nos hacen felices sin que tengan que reducirse a estar enamorado o encoñado (suena fatal pero es algo que veo a menudo). Los hombres no eligen a mujeres que no les necesitan, y mucho menos a mujeres con más éxito profesional que ellos. La ecuación es simple:

Mujer exitosa profesionalmente+hombre que no lo es tanto= problema asegurado debido a un complejo de inferioridad (la envidia es muy mala,dicen).

Mujer que no renuncia a sus aspiraciones= problema al cuadrado

Ahora a despejar la incógnita, dos posibles resultados: 1. te quedas sola y serás mal vista por la mayoría; 2. Bajas la cabeza,asientes, y te vas detrás de él a convertirte en un ser dependiente a todos los niveles. Y la tercera posible es que puedas con todo y seas una superwoman del siglo XXI.

Triste pero cierto. Es deprimente ver como muchos carecen de inteligencia emocional (no sé por qué está de moda llamarle así a lo que conocemos de toda la vida como "tener sentido común").


Y termino diciendo algo de lo que hablamos ayer:

"tu vida es tuya, los hombres de tu vida no existen" (parafraseando a un hombre que estuvo muy acertado).


Pd. No te preocupes si no todos te apoyan, mientras haya una sola persona que te comprenda basta, porque sabes lo que tienes que hacer y qué es lo correcto para ti :)

sábado, 7 de noviembre de 2009

Cosas que hacer antes de estar muerta



A veces pienso en lo larga y lo corta que es la vida,y pienso en todas aquellas cosas que me gustaría haber hecho y las que me gustaría hacer en el futuro. Aunque son cientos siempre intento resumirlas...y aún así siempre me falta alguna...
  • Fumar un cigarro delante del Taj Mahal yo sola.
  • Viajar por Asia.

  • Juntar en una gran fiesta a mis amigos y familia para celebrar lo mucho que significan para mí.

  • Tener descendencia (con sus correspondientes prácticas :P ).

  • Hacer submarinismo (repetir la experiencia en este caso).

  • Perderme en una isla desierta una semana.

  • Conducir un Aston Martin modelo Vanquish.

  • Hacer el transiberiano (con su buen cargamento de vodka).

  • Andar descalza por los charcos.

  • Cenar una noche de verano en un prado.

  • Tirarme de un acantilado (como los mejicanos de Acapulco,no para matarme claro está).Es como puenting acuático.
  • Perdonarte y perdonarme.

  • Visitar el museo de la Biodiversidad de Panamá.

  • Ir a un autocine a ver una peli clásica.

  • Quererte un poco más y autocontrolarme un poco menos.

  • Tener un perro, o varios.

  • Hacer el camino de Santiago.

  • Conducir en una carretera desierta sin límite de velocidad.

  • Abrir los ojos una última mañana y verte a mi lado, ya sólo por eso mi vida habría valido la pena.

Ojalá me dé tiempo a hacerlo todo.

¿Y tú qué pondrías en tu lista?

sábado, 31 de octubre de 2009

Pour femme...oui ces´t moi!


Según la RAE:

feminismo.
(Del lat. femĭna, mujer, hembra, e -ismo).
1. m. Doctrina social favorable a la mujer, a quien concede capacidad y derechos reservados antes a los hombres.
2. m. Movimiento que exige para las mujeres iguales derechos que para los hombres.


El feminismo es una de esas cosas, al igual que el marxismo, que ha tenido en nuestra sociedad una interpretación errónea. Quizá es uno de los motivos por los que detesto las etiquetas, parece que ser mujer y decir que no te consideras feminista sea pecado capital.
Pero el feministo es un concepto, a mi modo de ver, relativo.
No me considero feminista simplemente por el hecho de que no me considero menos que un hombre.

Parece que está de moda esa hiper-reafirmación de la mujer, he de reconocer que me hace gracia ver como esas feministas para reafirmar su rol femenino, precisamente se dedican a imitar comportamientos y apariencias masculinas.
Y a mi me llaman machista por vestirme de mujer. Me río de nuevo. Es que soy una mujer y orgullosa de serlo, yo no necesito vestirme como un hombre ni comportarme como tal. Y en absoluto me visto de mujer para gustarle a los hombres, que eso también lo he tenido que oir, me visto como me da la gana porque me veo "divina de la muerte" delante de los espejos,me siento bien conmigo misma siendo lo que soy.

Cierto es que vivimos en una sociedad patriarcal, pero eso no hace que mi vida sea peor ni me siento un ser inferior, y mucho menos el sexo débil.

Es como lo de "miembros y miembras", de las mayores estupideces que he oído en los últimos años, no me voy a sentir mejor porque me llamen miembra sinceramente. Creo que alguna gente todavía no ha superado el siglo XIX...sin haberlo vivido siquiera.

Luego está el tema de la igualdad laboral, personalmente en mi gremio hombres y mujeres cobramos lo mismo y ambos optamos a conseguir puestos de más altura. Creo que esa clase de desigualdad la exageran...porque digo yo: dile a una mujer que se vaya a la mina o a un andamio, a ver qué responderían esas feministas (de pelo en pecho). Es ese feministo selectivo lo que no soporto...soy mujer para lo que me conviene. No señoras, las cosas no funcionan así.
Me parece estupendo que una mujer pueda desarrollar su carrera profesional y ser independiente, pero las que más jaleo arman son despues las primeras en atarse a un marido y renunciar a sus metas profesionales por criar a unos hijos mientras él sale a trabajar. ¿Me sigo riendo?. Que cuidar a una familia tiene mucho mérito,no lo pongo el duda. Pero creo que a muchas mujeres les falta la capacidad de ser consecuentes con sus palabras cuando se tachan a sí mismas de feministas.

A día de hoy creo que la verdadera esencia del feminismo bien interpretado, reside sobre todo en aquellos hombres (sí, habeis leído bien: hombres) que no permiten que sus parejas renuncien a su vida profesional, que son capaces de hacer las tareas del hogar, que son capaces de quedarse en casa cuidando a los niños en vez de irse al fútbol mientras ella resuelve temas laborales. Eso es la igualdad, y no salir a la calle con cuatro pancartas a meter ruido creyendo que así superarán sus complejos internos.

Que la época de Tarzán y Jane ya es historia pasada....

jueves, 29 de octubre de 2009

Near Besides

Y son de Madriz...increíble pero cierto.
Pd. por un buen momento ya vivido pero no olvidado...just this time hold me tight...

Twisted Oaks:
http://www.youtube.com/watch?v=YuJvUELBBH0

domingo, 25 de octubre de 2009

Superheroes


Esta semana el tema que me ocupa es seguir profundizando en la psique masculina, no es por levantar ampollas, pero hay un comportamiento que se repite en la inmensa mayoría de hombres que conozco, y he de pensar que se produce debido a factores sociológicos (aparquemos factores biológicos por unos instantes).

Pues bien, me he fijado que a la hora de elegir pareja los hombres suelen decantarse por mujeres que tienen algún tipo de debilidad notable. Me refiero a mujeres con problemas de inseguridad, mujeres con grandes carencias afectivas, mujeres con un pasado complicado o simplemente mujeres incapaces de estar solas o incapaces de seguir avanzando.

En definitiva, los hombres eligen mujeres que necesitan ser salvadas.

Como si de un superheroe se tratase, el hombre llega volando y salva a la pobre mujer, víctima de las circunstancias de la vida. Ella muestra su debilidad y él muestra su fuerza, y que mientras estén juntos, nada malo podrá pasarle. Lo que el hombre no sabe, (o lo sabe y se hace el loco) es que de esa forma lo único que consigue es alimentar esa debilidad y seguir creando inseguridades, de todo ello el resultado es que hay gran número de mujeres que no saben estar solas, bien sea porque necesitan sentirse arropadas, o bien sea porque necesitan que alguien les caliente la cama. Y así van dando bandazos sin saber nunca qué es lo que realmente quieren.

Todo se reduce a una palabra: necesidad.

¿Pero qué pasa con las mujeres que no necesitan ser salvadas? Una de dos: o se quedan solas porque no tienen esa necesidad de compañía; o se inventan debilidades donde no las hay para que alguno se acerque. Porque se puede querer tener pareja pero no necesitarla.

Aunque también se da el caso de hombres que valoran esa independencia y que no llevan capa de superheroe y que son capaces de tener relaciones al mismo nivel tratando a sus parejas como iguales. Sólo conocí a dos de esos, serán especie en extinción.

No todas las mujeres son dependientes del afecto, del romanticismo o de esa dependencia emocional que parece estar tan de moda.

Se puede ser feliz sin tanto adorno.


martes, 20 de octubre de 2009

Sueños enjaulados



¿Cúal es tu sueño?Todos tenemos uno al menos.

Cuando somos niños soñamos siempre con "tener", ya sea una bicicleta, unos patines, la barbie último modelo o el fuerte de playmobil...como si todo eso fuese a darnos una especie de felicidad eterna, años despues te preguntas ¿para qué quería yo ese trasto?.

Pero la cosa cambia a medida que nos hacemos adultos (porque nos estamos haciendo mayores,no dejo de oir esa frase continuamente) dejamos ese "tener" de lado cuando ya lo "tenemos todo", despues de una casa,un coche, y sumándole unos cuantos caprichos,es cuando nos centramos en el "ser". Y yo quería ser libre.

Yo quería no tener obligaciones.
Yo quería ir y venir sin tener que dar explicaciones ni responder a los malditos por qué.
Yo quería poder sonreir y llorar al mismo tiempo sin que hubiese un motivo.
Yo quería levantarme a cualquier hora del día sin tener que mirar al reloj, ni siquiera por inercia.
Yo quería cruzar las calles sin mirar.
Yo quería tirarme a la piscina con la confianza de que siempre habrá agua dentro.
Yo quería volar.
Yo quería viajar lejos, y cuando estuviese allí, viajar más lejos todavía, y conocer, degustar, oler y atraparlo todo en un sólo recuerdo.
Yo quería ser efímera y perdurar en el tiempo, como una sombra que pasa de cubrir un milímetro a cubrirlo todo.
Yo quería ser otra persona.

Los sueños siguen ahí,hablo en pasado pero no puedo renunciar a ellos.

Los sueños existen, y los días grises también.

Sigamos soñando mientras quede tiempo...

Cualquiera tiene un mal día, pero nunca sabemos como terminará http://www.youtube.com/watch?v=yk_9sEhV3vM

martes, 13 de octubre de 2009

Espada de Damocles


Si hay algo en el mundo que demuestra que el movimiento existe son los cambios. Como ya dije anteriormente a menudo nos hallamos entre situaciones en las que podemos elegir un camino u otro,y eso hace que las cosas cambien parcial o totalmente. A veces no elegimos y el cambio cae sobre nuestras cabezas como la espada de Damocles.
Este post se debe a reflexiones de estos últimos meses. La gente me dice que he cambiado, creo que siempre he estado en cambio continuo, pero quizá este verano ha marcado una diferencia muy grande entre el antes y el despues. Como dice una amiga mía "llamémosle momento post EA" (las siglas tienen su significado que no desvelaré).
La mía ha sido una fase evolutiva en la que me he dejado a varias personas por el camino, pero era algo mortal de necesidad. A veces ciertas personas no nos dejan seguir caminando, y si sólo fuese eso...pero es que encima se empeñan en poner zancadillas, suerte que siempre fui buena saltadora. En esos casos vuelve a aplicarse la regla del tres: no lloro por nadie más de tres días, no importa lo que suceda, al cuarto día resucito y me levanto con más fuerza que nunca. Muchos me tachan de ser demasiado dura, de que parezco impasible ante ciertas cosas que me han ocurrido estos meses...pero la realidad se impone, y la realidad es que hay que seguir caminando.
Cierto es que las cosas han cambiado mucho, pasé de un estado de preocupación a un estado de indiferencia en muy poco tiempo hacia algunas personas. Me dí cuenta de que cuanto más daba, más recibía...lo malo es cuando sólo se reciben palos.
Así que sin saber cómo ni por qué exactamente, dejé de planificarlo todo, dejé de necesitar estar triste, dejé de echar de menos, dejé de tener ganas...y pensé que estaba vacía, y sobre todo: deje de justificar lo injustificable. Me pasé años justificando,dando explicaciones y defendiendo cosas que ni siquiera podía entender...en el momento post EA volví a la vida, empecé a dejarme llevar por las situaciones y volví a sonreir. Ahora me levanto por las mañanas sin aquella amargura, aunque es inevitable que algunos recuerdos sobrevivan, pero es que ya ni siquiera siento pena alguna por la pérdida. No fui yo quien fracasó. Parece ser que la espada de Damocles al caer partió el camino en dos...y fue una despedida sin adiós, pero despedida al fin y al cabo.
Sin rencores.

lunes, 5 de octubre de 2009

Regla de 3


Este post poco tiene que ver con mas matématicas, que no os engañe el título...El tema que me ocupa hoy es la típica frase de: a la tercera va la vencida, aunque yo tenga una interpretación diferente sobre ella. Parece que el número 3 sea uno de esos números que dominan mi vida, ya que me ha dado por crear algo a lo que yo llamo La Norma del Tres.

Creo que cada persona merece tres grandes oportunidades para estar o no dentro de mi vida, una vez que falla esas tres veces, borrón sin cuenta nueva, de repente decido que no existe más.Hace no mucho alguien gastó la tercera oportunidad, ni siquiera puedo decir que me haya dado pena, más que nada porque esas tres oportunidades acabaron quemándome la paciencia, da miedo pensar que puedo romper una amistad de años basándome en mi norma del tres, pero quien falla tres veces...fallará cuatro,y así consecutivamente. En estos casos es necesario poner un baremo para evitar "que se te suban a la chepa", por decirlo de algún modo.

La Norma del Tres es extensible a otras áreas de la vida, una de ellas son las relaciones. Poneros en situación: conoceis a alguien que os atrae, en principio pensais en una historia corta que no traiga complicaciones. Mi norma dice: no te líes con nadie más de tres veces, si cruzas la frontera de las tres, nace el peligro de que haya un punto de no retorno. Más de tres significa: esto puede ir a más y alguien acaba "pillado". Sé que es difícil llevar a cabo esta norma,pero no es imposible siempre y cuando se tengan las ideas claras. Evidentemente cuando sobrepaso las tres, es que la persona lo vale. En otros casos los hay que no llegan ni a la segunda y días despues piensas: no tuvo que haber ni una primera jajaja (esas cosas suceden cuando te tomas más de tres copas).

El tres vuelve a la carga en otras situaciones del estilo: si no me saco esto a la tercera, lo dejo.

La gente suele preguntarme: ¿por qué tres? mi primera respuesta siempre es: ¿y por qué no?. El caso es que creo que el tres es un número de equilibrio, es un punto medio, no es poco ni mucho. Simplemente es lo justo.

sábado, 26 de septiembre de 2009

Rumores que matan




¿Cuántas veces nos hemos visto perjudicados por un falso rumor?



Una de las grandes cualidades del ser humano desde tiempos ancestrales: el cotilleo. Hay diversos motivos por los que sacamos la lengua a pasear más de lo debido, lo malo es cuando perjudicas a otra persona, sea a propósito o no.



Los rumores están en nuestras vidas desde la infancia, ¿quién no ha sufrido duros comentarios en el colegio de niños?, ahí es donde aprendemos que la sociedad puede condicionar el futuro de las personas, ya que si perteneces a un grupo "guay" (llamémoslo así) rara vez habrá problemas, sigue a la masa dominante y fúndete con ella. El problema es pertencer al grupo de los "pringaos" aquellos que son ignorados o víctimas de duras burlas (eres feo/a,eres gordo/a, eres raro/a o incluso: eres gay, por no usar palabras que suenan mal, aunque no sepan muy bien lo que significa), no es de extrañar que el suicidio de niños y adolescentes vaya en aumento.

Es así como arrastramos complejos de la infancia a la vida adulta, cerrándonos a los demás y viviendo en la desconfianza continua, no es extraño ver a personas que viven a la defensiva tratando de protegerse de un posible daño. A veces no somos conscientes del alcance de nuestras palabras.

Porque la rumorología es algo que se extiende como un veneno que es muy difícil de frenar. No podemos evitar que hablen de nosotros, incluso personas que no nos conocen, el caso es hablar por hablar, y no sólo eso, sino que en muchas ocasiones esos rumores tienen una intencionalidad hiriente desde un principio. De esta forma de repente un día estamos tranquilos y al otro día todo lo contrario. No acabo de entender por qué personas adultas son capaces de inventarse cualquier cosa para perjudicar tanto a desconocidos como a amigos o familia, quizá la envidia sea el motor de todo eso, o que ver a otro en una situación peor a la nuestra alivia el ego. Lo curioso es que se trata de un fenómeno asociado al mundo femenino, cuando los hombres en cuestión de rumores pueden ser incluso peores que nosotras, es algo que veo periódicamente, pero claro...si eres hombre y cotilleas, eres gay, no falla (otro rumor absurdo donde los haya). Viendo un programa hace unos días oí un comentario de una mujer que decía: ese chico lee prensa rosa, para mí que es gay... Me molesta que hasta las mujeres sean quienes asuman el cotilleo como algo propio.


Personalmente me ha tocado vivir situaciones de este tipo, si todo fuese cierto, a día de hoy tendría un harem de amantes, una media docena de hijos más o menos,y ya me habría casado como cuatro veces, eso sin contar dos accidentes de coche que tuve y de los cuales no tengo noticia...y así un largo etcétera.

A todos esos que hablan tanto y que tienen tan mala baba sólo puedo decirles una cosa:



NO SABEIS DE LO QUE HABLAIS.

martes, 22 de septiembre de 2009

Venus vs. Marte



Curiosa la nostalgia que me ha entrado hoy sobre escritos de ayer. JP te dije que sacaría algo de mi cajón de los secretos, esto es algo que escribí allá por Abril de 2006...


El mundo sigue tan loco como siempre y la sociedad a la deriva. Hoy pienso en esas diferencias entre hombres y mujeres, pero sin pretensiones de hacer apología de feminismos o machismos, tratando de ver las cosas desde un punto de vista racional y objetivo.
No paro de ver en todos sitios las típicas imagenes de mujeres enamoradas, mujeres que buscan su príncipe azul, mujeres cuya meta es atrapar un marido y vivir felices en su mundo rodeadas de una familia y una vida sexual que poco a poco va en declive. Pienso en qué es lo que hace que el amor resulte tan necesario en la vida de la mayoría de las personas. Dicen que somos las mujeres las que antes maduramos y antes buscamos una estabilidad emocional, afortunadamente esto está cambiando y cada vez es menor el número de personas dependientes de una relación de pareja. ¿Es tan grande el miedo a quedarnos sólos?¿no hay más vida después de una o varias relaciones de pareja? Yo creo que sí, hay toda una vida y todo un mundo...miles de cosas que llenan nuestro día a día, cosas que logran hacernos felices si sabemos cómo colocar cada una en su lugar y en el momento adecuado.
Y siempre añadiendo esos momentos de ...¿locura? esas noches interminables de fiesta, esos amores de una noche, esa costumbre de dar nombres y números de teléfono que no existen, esos "olvidos" tan oportunos cuando vuelve a aparecer alguna de esas conquistas que sólo queremos olvidar y que ni siquiera ocupan un lugar en nuestras agendas, o el clásico "ya nos veremos" y nunca más se supo nada...
Ahora somos nosotras las que hacemos esas cosas que generalmente veíamos en el estereotipo de "hombre cabrón"...no os confundais chicas: nosotras también aprendimos a ser libres alguna vez, sólo hay que llevarlo a la práctica...aunque cueste críticas y comentarios que nunca quisimos escuchar.
Nosotras no estamos en la obligación de amar a nadie sólo por el hecho de intercambiar placeres, no somos tan diferentes. Sólo falta que medio mundo lo entienda, no necesitamos una pareja simplemente por incercia, de hecho no debería ser una necesidad, sino algo que nos haga vivir todavía con más intensidad.
No voy a contaros que el amor no existe, ni que dura tres meses, ni nada parecido, vamos a respetar teorías y creencias.
Y los hombres que lo lean, no os ofendais, sé que muchos de vosotros sabeis amar aunque no sepais demostrarlo ;) sólo pido compresión para todas esas mujeres que salen a la calle cada día sin estar enamoradas, que disfrutan de la vida y sus placeres sin buscar un compromiso, que los tiempos están cambiando y a muchas personas les queda mucho por andar...detrás de una mujer que disfruta de la vida no siempre está el oficio más antiguo del mundo.

Otro extracto del pasado:

Descubrieron que los amores no son eternos,
que los días se pasaron entre horas de rutina y agotamiento,
que las noches sólo descubrían las sombras de un pasado infiel,
y pensaron en todas las sombras que alguna vez habían amado.
Descubrieron que sus besos eran iguales a los del resto,
que el tiempo les cambiaba la voz y les quitaba el sentimiento,
que los sentidos se quedaban mudos a la hora de amar,
y callaron sus suspiros entre miles de recuerdos.
Se descubireron a sí mismos como dos desconocidos.

sábado, 19 de septiembre de 2009

Dos vidas en un instante


Esta tarde estaba dando un paseo, al ser día de lluvia mucha gente optó por coger el autobús, de repente delante de mí, una mujer de mediana edad corría intentando no perder el número 11...pero,demasiado tarde. Puede parecer absurdo pero en ese momento vino a mi mente una película que vi hace años "Dos vidas en un instante", para quien no la conozca: va de una chica que va a coger el metro para volver a casa, y de repente el hecho de perder o no el metro, hace que su vida se bifurque en dos versiones: en la primera coge el metro,llega a casa y encuentra a su pareja siéndole infiel; en la segunda versión pierde el metro y llega a casa justo a tiempo para no ver la escena. Pero en ambas versiones conoce al amor de su vida, he de suponer que estaba en su destino.

Y yo ahora me pregunto cúantas veces en la vida una persona se encuentra en un punto de encrucijada, dónde dos o más posibilidades se dan, unas veces somos nosotros quienes las escogemos y otras veces parece que sea el destino quien juega con nosotros. Detalles mínimos de la vida cotidiana, en tan sólo un segundo el mundo da un giro de 360º aunque a veces ni seamos conscientes de lo que ocurre.
Pienso en todos los metros y autobuses que he perdido en mi vida, en todas las veces que he llegado tarde... Imagino las diferencias que pueden suponer el elegir salir un día a la calle o quedarme en casa, coger el coche o ir andando, y siempre me pregunto lo mismo: "y que pasaría si..." pero me doy cuenta que esos "si" condicionales no existen una vez que pierdes el autobús, prefiero pensar que las cosas pasan por algo y que no estoy en manos de la casualidad.
Gracias a esos cambios de trayectoria también te cruzas con desconocidos que dejan de serlo, y años despues entre risas les preguntas : ¿por qué nos conocimos tú y yo?. Sólo sé que doy las gracias a esos instantes que cambiaron la vida, para bien o para mal.

Todo tiene una razón, aunque sea el destino escondido en un rincón trazando un plan para ti, no importa...una mañana te levantarás y sabrás que no vives una,ni dos,ni tres, sino infinidades de vidas que no ves y en las que interfieres sin darte cuenta.
Una de las canciones de la película, la más conocida era la de Turn Bacl Time de Aqua, pero preferí poner esta: http://www.youtube.com/watch?v=HNTqHOqcyWY

viernes, 18 de septiembre de 2009

Recordando lo olvidado

Hace diez años alguien me dijo: la vida es como un cuadro de Picasso, todo depende de los ojos que lo estén mirando, cada cuadrado de pintura es un momento de esa vida, todo tiene un color,una forma...y un sentimiento diferente...
Hoy empieza una nueva mirada a ese cuadro que tenía tan olvidado.